La aceptación de esta realidad ha normalizado la situación en la que un único progenitor, o éste con su nueva pareja, se haga cargo del día a día de sus hijos. Esto, juntamente con el reconocimiento de la plenitud de derechos de la mujer, hace que no resulte socialmente extraño que una mujer sola o una pareja de mujeres formen una familia.
Una mujer sola o una pareja de mujeres no pueden tener hijos sin ayuda. -hay que utilizar espermatozoides de donante para conseguir fecundar el óvulo. Hay bancos de semen que disponen de muestras controladas de múltiples donantes. De esta manera se puede encontrar el donante más adecuado para una mujer concreta. En algunos paises el donante no es anónimo y en otros se puede escoger en un catálogo que muestra aspectos físicos, intelectuales y su historial familiar, académico y médico desde la infancia; incluso sus gustos y actividades de ocio.
El ginecólogo debe evaluar las condiciones de salud y fertilidad de la mujer que quiera tener el hijo y proponerle los métodos que sean más convenientes para sus condiciones.